Importancia Histórica
En la Edad Media, especialmente durante los siglos XII y XIII, el comercio de lana se convirtió en una importante fuente de riqueza para España. La lana española, conocida por su alta calidad y variedad de colores, era demandada en toda Europa y se exportaba en grandes cantidades a países como Flandes e Inglaterra. Se consideraba el Oro Blanco.
En el siglo XVI, España experimentó un gran desarrollo en la industria textil, impulsado en parte por la lana como materia prima. Se establecieron fábricas de tejidos y talleres de artesanos que producían una amplia variedad de productos de lana, desde mantas y tapices hasta prendas de vestir de alta calidad.
EL ORO BLANCO APENAS REPRESENTA EL 1% DE LAS FIBRAS UTILIZADAS EN EL MUNDO TEXTIL
Realidad Presente
Mucho ha cambiado la cosa desde entonces, a pesar de ser una fibra alineada con la lucha por mantener la sostenibilidad de nuestros ecosistemas, la fijación de la población rural y ser 100% biodegradable y naturalmente renovable. En la actualidad la lana apenas representa el 1% de las fibras utilizadas en la industria textil a nivel mundial, ocupando España el sexto lugar dentro de este ínfimo porcentaje.
Esto ha llevado a este “ORO BLANCO” a ser considerado un subproducto o residuo que genera pérdidas de poder adquisitivo a los productores y se gestiona en la mayoría de los casos como un residuo oneroso de gestionar, terminando en vertederos y desaprovechando sus increíbles características físicas y culturales.
El mundo textil ha involucionado con el tiempo, se han realizado grandes avances tecnológicos y gastado mucho tiempo y dinero en búsqueda de fibras de origen fósil que sustituyeran o mejoraran las características de la lana, sin darnos cuenta que estas fibras empeoraban la salud de nuestro planeta a pasos agigantados.
De los miles de oficios que giraban entorno a esta fibra, se pueden contar con los dedos de las manos los que seguimos en pie, guiados más por una pasión y amor por el oficio y esta fibra que por los rendimientos económicos.
Aún hay esperanza
En este mundo actual y acelerado en el que cada vez se presta menos atención a nuestras raíces culturales y a nuestro legado ancestral, WOOL4LIFE innova volviendo al origen.
En Mota del Cuervo, cuenta con el mayor taller artesano textil de Castilla La Mancha en el que ofrecen una trazabilidad sostenible a sus productos desde el vellón a la pieza final tejida.
Un hito único a nivel mundial que permite a nuestros clientes aportarle a sus piezas una historia de valor incalculable. Una historia que les une desde la oveja hasta sus manos, creando un vínculo y experiencia emocional sin precedentes y asegurando una mejora de las situaciones medioambientales, económicas y sociales de toda la cadena de valor.
Estas piezas permitirán iniciar una nueva época en la historia de nuestro país y devolver a la lana local el apodo que nunca debió perder: EL ORO BLANCO.